Antes de formarme como terapeuta me dedicaba a los Recursos Humanos, tenía mi vida muy estructurada  y estaba muy lejos de comprender todo este mundo en el que ahora me desenvuelvo con fluidez, pero las señales fueron claras y aunque me costó muchísimo aceptarlo y soltar todo lo que había aprendido y conseguido hasta ese momento (mi trabajo, amistades, pareja, estabilidad financiera) la transformación ha sido maravillosa.

Abrirme a mi verdad me ha traído grandes regalos y me siento tremendamente afortunada, sentí miedo, tuve dudas, viví el rechazo de personas de mi entorno que no entendían mi decisión pero cada paso, cada trecho del camino ha merecido la pena, por que ahora estoy aquí preparada, dispuesta y  encantada de acompañarte en tu camino de descubrimiento, no estás sola … yo estoy contigo.